“Las comidas que incrementan la vida, pureza, fuerza, salud, alegría y felicidad, siendo sabrosa y armónica, son las que comen las personas sátvicas”.
– Bhagavad Gita, XVII, 8.
En la práctica de Yoga Ashtanga la alimentación tiene un rol fundamental ya que esta conlleva una fuerte demanda a nivel físico.
Si bien el ideal de alimentación variará de acuerdo a las necesidades, genética y metabolismo de cada persona, una dieta lacto-vegetariana orgánica que incluya frutas y verduras frescas, granos, cereales y brotes es en general la forma básica de dieta saludable recomendada para acompañar y potenciar los beneficios de la práctica de Ashtanga.
Esto tiene su fundamento en considerar que todo lo que proviene de manera directa de la tierra es más nutritivo y saludable que lo que proviene de manera indirecta de la misma.
Asimismo, se considera que el consumo de carne animal desde el punto de vista energético favorece las conductas hostiles y pasionales, al incorporar el miedo y la violencia sufridos por el animal ante la muerte.
Los Gunas y sus tipos
Dentro de la tradición yóguica todos los elementos de la realidad, es decir aquellos que constituyen el mundo físico, integran en diferentes medidas alguna de estas tres categorías esenciales llamadas Gunas:
- Sátvicos (puros): Relacionados a la energía equilibrada, a la pureza. Comprende a los alimentos de fácil digestión como los cereales, legumbres, leche y ghee, frutas y jugos e infusiones naturales. La moderación en su consumo es clave, deben consumirse crudos o pocos cocidos y si se toman con prisa adquieren características rajásicas. Una dieta sátvica es una alimentación que aporta energía vital (prana) y que estimula las facultades mentales provocando un alineamiento natural.
- Rajásicos (activos): Los alimentos rajásicos si bien proporcionan energía, sobreexcitan el sistema nervioso y favorecen la dispersión. Incluyen los pescados y carnes frescas, los condimentos picantes, ajo, cebolla, café, té, también aquellos en demasía salados, dulces o muy condimentados. Estos alimentos al ser estimulantes incitan a consumirlos en exceso. Las personas rajásicas son más apasionadas e impulsivas, características no compatibles con las que se persiguen en la práctica del Yoga Ashtanga.
- Tamásicos (Inercia): Vinculado a la apatía, a lo inerte. Favorecen a la pereza y a la depresión. Dentro de los alimentos tamásicos se encuentran los que originalmente eran sátvicos, que quedaron como restos de días anteriores y que han sido manipulados o recalentados. Incluyen también al pescado y la carne de animales muertos hace días, los fritos, los quesos duros, los vegetales demasiados maduros o verdes, el vinagre y las conservas.
El consumo excesivo de cualquier tipo de alimento, al hacer lento el proceso digestivo, provoca que éstos se conviertan en tamásicos.
La dieta yogui por excelencia
El tipo de dieta adoptada por quienes siguen un estilo de vida yóguico es la alimentación sátvica, es decir aquellos alimentos con predominio de este guna, ya que estimulan la calma y la claridad mental.
En cuanto a la preparación, la tradición yóguica asegura que la comida incorpora de alguna manera los sentimientos y los pensamientos que poseemos al momento de consumirla, así como también los de las personas que la prepararon. Proponer realizar el acto de comer con conciencia, masticando lentamente y saboreando el alimento.
Para optimizar las cualidades de la práctica del Ashtanga
En la práctica de Yoga Ashtanga la alimentación tiene un rol fundamental ya que esta conlleva una fuerte demanda a nivel físico.
Si bien el ideal de alimentación variará de acuerdo a las necesidades, genética y metabolismo de cada persona, una dieta lacto-vegetariana orgánica que incluya frutas y verduras frescas, granos, cereales y brotes es en general la forma básica de dieta saludable recomendada para acompañar y potenciar los beneficios de la práctica de Ashtanga.
Esto tiene su fundamento en considerar que todo lo que proviene de manera directa de la tierra es más nutritivo y saludable que lo que proviene de manera indirecta de la misma. Asimismo, se considera que el consumo de carne animal desde el punto de vista energético favorece las conductas hostiles y pasionales, al incorporar el miedo y la violencia sufridos por el animal ante la muerte.
Los Gunas y sus tipos
Dentro de la tradición yóguica todos los elementos de la realidad, es decir aquellos que constituyen el mundo físico, integran en diferentes medidas alguna de estas tres categorías esenciales llamadas Gunas:
- Sátvicos (puros): Relacionados a la energía equilibrada, a la pureza. Comprende a los alimentos de fácil digestión como los cereales, legumbres, leche y ghee, frutas y jugos e infusiones naturales. La moderación en su consumo es clave, deben consumirse crudos o pocos cocidos y si se toman con prisa adquieren características rajásicas. Una dieta sátvica es una alimentación que aporta energía vital (prana) y que estimula las facultades mentales provocando un alineamiento natural.
- Rajásicos (activos): Los alimentos rajásicos si bien proporcionan energía, sobreexcitan el sistema nervioso y favorecen la dispersión. Incluyen los pescados y carnes frescas, los condimentos picantes, ajo, cebolla, café, té, también aquellos en demasía salados, dulces o muy condimentados. Estos alimentos al ser estimulantes incitan a consumirlos en exceso. Las personas rajásicas son más apasionadas e impulsivas, características no compatibles con las que se persiguen en la práctica del Yoga Ashtanga.
- Tamásicos (Inercia): Vinculado a la apatía, a lo inerte. Favorecen a la pereza y a la depresión. Dentro de los alimentos tamásicos se encuentran los que originalmente eran sátvicos, que quedaron como restos de días anteriores y que han sido manipulados o recalentados. Incluyen también al pescado y la carne de animales muertos hace días, los fritos, los quesos duros, los vegetales demasiados maduros o verdes, el vinagre y las conservas.
El consumo excesivo de cualquier tipo de alimento, al hacer lento el proceso digestivo, provoca que éstos se conviertan en tamásicos.
La dieta yogui por excelencia
El tipo de dieta adoptada por quienes siguen un estilo de vida yóguico es la alimentación sátvica, es decir aquellos alimentos con predominio de este guna, ya que estimulan la calma y la claridad mental.
En cuanto a la preparación, la tradición yóguica asegura que la comida incorpora de alguna manera los sentimientos y los pensamientos que poseemos al momento de consumirla, así como también los de las personas que la prepararon. Proponer realizar el acto de comer con conciencia, masticando lentamente y saboreando el alimento.
Para optimizar las cualidades de la práctica del Ashtanga Yoga, se destaca la importancia de la siguiente regla general: No saciarse. Se debe llenar la mitad del estómago de comida, una cuarta parte con agua y dejar libre el cuarto restante.
Por último, aconsejan las tradiciones hindúes realizar siempre una cena ligera y cada cierto tiempo dar un descanso al sistema digestivo, con un ayuno de un día completo.